IMPACTO DE LA CORRUPCIÓN Y SUS EFECTOS EN LA COMPETITIVIDAD DE LAS EMPRESAS

21 de febrero del 2017 | por Top Management

∙ México, país de muy alto riesgo en temas de corrupción de acuerdo con el Foreing Corrupt Practices Act (FCPA) en Latinoamérica.

∙Empresas, con la oportunidad de fortalecer sus relaciones de negocios y posicionarse mejor.

∙Estudio de PwC revela también que una de cada cinco organizaciones en México fue víctima de estos delitos en los dos últimos años.

El 90% de los CEO mexicanos considera que la corrupción y el soborno son la principal amenaza para sus negocios, según la 7ª Encuesta de CEO en México de PwC 2016, datos corroborados por la Encuesta de Delitos Económicos de PwC 2016, cuya información revela que una de cada cinco organizaciones en México fue víctima de estos delitos en los dos últimos años.

Ante este panorama, PwC México organizó una serie de eventos sobre el tema, donde importantes especialistas de México y Estados Unidos se reunieron para analizar a fondo el impacto de la corrupción y otras prácticas que golpean a las organizaciones en ambos países, afectando su competitividad y desarrollo económico.

Las sesiones del evento “Corrupción, implicaciones en la competitividad de las empresas mexicanas” en Ciudad de México y Monterrey tuvieron la participación de expertos como: Max Kaiser, director de Anticorrupción del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO); Manny Alas, líder global FCPA de PwC Estados Unidos, Alfredo Hernández y Alberto Jaquez, socios de Servicios Forenses de PwC México. Entre los asistentes acudieron ejecutivos de diversos cargos, como Chief Compliance Officers (CCO), General Council, abogados generales, presidentes de comités de auditoría, business development strategists, entre otros.

México, país de alto riesgo

Diversas encuestas y casos sancionados por leyes anticorrupción internacionales, posicionan a México como un país de muy alto riesgo en temas de corrupción; derivado de esto el gobierno mexicano promulgó el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) en mayo de 2015, así como como sus leyes secundarias en julio de 2016 los que ofrecen, por fin, un marco legal para atacar estas prácticas. El SNA y las recientes leyes aprobadas en julio pasado ya están haciendo sentir sus efectos, ya que las faltas graves y los delitos por hechos de corrupción en que pueden caer las compañías, y quienes las representan, han sido tipificadas administrativa y penalmente, siendo los recientes casos de gobernadores y funcionarios uno de sus más claros ejemplos.

Esto también tendrá impactos favorables para las organizaciones, ya que al promover una menor o nula corrupción en éstas, podrán posicionarse para establecer o fortalecer sus relaciones de negocios con socios actuales y potenciales, reguladores, accionistas y la sociedad misma.

La competitividad y sus enormes beneficios

La transparencia y la rendición de cuentas son dos de los pilares que cimentan las acciones anticorrupción. Asimismo los beneficios de mitigar los riesgos y cumplir prácticas más sanas abrirán la puerta a las organizaciones hacia la ventaja competitiva en el mercado, adoptando elementos anticorrupción como un compromiso corporativo, y en donde tanto los altos directivos y sus colaboradores abracen y fomenten una cultura de negocios libre de corrupción.

Los costos de operación y sus utilidades se verán recompensadas al poner fin a estos actos nocivos, por lo que los resultados positivos en diversas industrias, donde la corrupción se ha extendido, podrían ser muy evidentes al adoptar un compromiso real y evitar prácticas que, en muchos casos, lastiman irremediablemente la integridad corporativa.