ALREDEDOR DEL 90% DE LOS EJECUTIVOS DE LOS GRANDES CORPORATIVOS RECIBEN AUTO O BONO PARA ADQUIRIRLO.

2 de agosto del 2006 | por Andrea Ramírez Riestra

De acuerdo con el estudio de Mercer, el 83% de las empresas otorgan automóvil y 6% lo hacen a través de un bono, como parte de la compensación total.

Mercer Human Resource Consulting revela, en un estudio con información efectiva a finales de 2005, que la prestación de automóvil asignado es una práctica empresarial frecuente en nuestro país.

Es importante destacar en este tema, que si bien durante los años setenta los autos eran totalmente deducibles para las empresas, en años subsecuentes se modificó la Ley de ISR y todavía hacia 2002 se limitaba esta deducción a $200,000 pesos y eliminaba el concepto de “Automóvil Utilitario”. Para 2003 queda establecida la cantidad de $300,000 pesos para deducción y no ha habido modificación a la fecha.

En 1992 ante la no deducibilidad de autos asignados, algunas empresas decidieron sustituir el auto por un bono que permitiese al ejecutivo adquirir o arrendar el auto en cuestión, naciendo el concepto de “monetización de la prestación vía bono” o bono sustituto de auto. Este “bono sustituto” sigue siendo utilizado por las compañías en lugar del auto asignado, aunque no es muy común.

En la actualidad el 89% de las empresas del banco de datos de Mercer, reportan asignar un auto o pagar un bono sustituto de auto a uno o más de sus ejecutivos y el 83% de estas empresas otorgan auto mientras que el 6% lo hacen a través de un bono.

Los niveles organizacionales considerados para la elaboración de este reporte fueron:

1. Director General/CEO
2. Director/Director
3. Gerente/Manager
4. Gerente Jr./ Jr. Management
5. Fuerza de Ventas/Sales Force

Las cifras de la prestación de otorgamiento de automóvil asignado se han mantenido estables en los últimos años, con excepción para el segmento de ventas, en donde vemos un incremento en la práctica de asignación con respecto a los últimos 2 años.

Para el nivel gerencial, en 2004 se tenía una prevalencia de asignación del 90% (sumando auto y bono), mientras que en 2005 esta tendencia se ha mantenido, pero con una mayor prevalencia en la asignación de auto.

La tendencia a otorgar esta prestación de asignación de auto, a niveles medios de la organización, es decir a gerencias Jr. o Jefaturas, se ha incrementado casi un 5%, mientras que en asignación de bono lo han hecho en alrededor de un 2%, cerrando para 2004 en 55%, y quedando en 61.5% en 2005. Para 2004, en el segmento de ventas, la prevalencia se ubicó en un 83%, mientras que en 2005 fue de 84.8%.

Los automóviles asignados se encuentran clasificados de acuerdo a su nivel de precios pesos mexicanos de la siguiente forma:

Tipo
“A” Compacto: 70,000 – 100,000*
“B” Mediano: 100,000- 150,000*
“C” Familiar: 150,000 – 220,000*
“D” Grande: 220,000- 350,000 *
“E” Lujo : 350,000- 500,000*
“F” Super Lujo: 500,000* en adelante

*Para fines de política escrita en las empresas la tendencia es la de establecer rangos de precios más que marcas o modelos. Esta clasificación está hecha con base a modelos típicos, no equipados. (Tipo de cambio $11.0 pesos por dólar).

Algunos de los beneficios del auto asignado

La gran mayoría de los programas de auto asignado prevén la cobertura de los gastos asociados al mismo como gasolina, mantenimiento, seguro, tenencia/impuestos y tasas de interés.

Los autos, asimismo, se reponen con una frecuencia media de poco más de tres años, existiendo ligeras variaciones por compañía y/o según el nivel organizacional del empleado y el 73.2% de las empresas que asignan un auto conceden a sus ejecutivos la opción de adquirir el auto usado a un precio preferencial.

Tendencias:

Las tendencias a nivel nacional tienen muy significativas variaciones de un sector industrial a otro y resulta muy interesante la diferencia entre la prevalencia de asignación de auto y bono sustituto entre industrias.

De acuerdo al reporte de Mercer, la frecuencia en general con la que se pagan los bonos sustitutos de autos es: mensualmente en un 11%; anualmente 72%; cada tres años o más 11% y otro, un 6%.

Diferencias por industria:

Al analizar la frecuencia en niveles gerenciales, aunque las proporciones en general aumentan en todos los giros, siguen dándose diferencias entre una y otra industria. Este año se ve un incremento a la práctica de asignación de auto versus bono en todos los segmentos.

Por Región:

De la misma forma que hay diferencias significativas por industria, existen también en la práctica de asignación de autos/bonos por región. Por ejemplo, a nivel de dirección, la frecuencia en la mayor parte de las ciudades es mayor, sin embargo en algunas de las ciudades fronterizas sigue existiendo una proporción relativamente baja de ejecutivos elegibles.

Expectativas para el futuro cercano:

Es muy probable que no se presenten cambios en la ley, por lo que podemos creer que el beneficio del auto asignado seguirá siendo uno de los componentes distintivos del paquete de los ejecutivos de la mayor parte de las empresas. Por otra parte, la disponibilidad de todas las marcas y modelos de lujo ha ido despertando el interés de muchos ejecutivos que, en muchos casos han logrado convencer a sus organizaciones de optar cada vez por vehículos más caros y sofisticados.

Mercedes Benz, BMW, Jaguar, LandRover, Audi y otras marcas que hasta hace poco no eran tan conocidas en nuestro país están ahora al alcance de cualquier organización que esté dispuesta a complacer a sus ejecutivos.




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