SUBE A 92% LOS CIBERATAQUES EN EMPRESAS MEXICANAS

25 de junio del 2018 | por Top Management

∙ El Reporte Global de Fraude y Riesgo 2017-2018 de Kroll indica que por los menos una vez en los últimos 12 meses las empresas han sufrido algún tipo de ciberataque

∙ El 34% de los ciberataques los realizan ciber criminales aleatorios. Pero el 66% de los ciberataques son dirigidos

∙ El 20% de los ciberataques son facilitados por errores de empleados que no siguen las medidas de seguridad

Ciberseguridad es un término que en los últimos dos años ha tomado gran protagonismo en las empresas e instituciones mexicanas. Los ataques cibernéticos generados en meses pasados como lo fueron el WannaCry y ExPetr (o Petya), que afectaron las operaciones de varias organizaciones, sobre todo del sector financiero y de telecomunicaciones, fueron llamados de atención importantes para tomar medidas más completas frente a los ciberataques.

El Director General de Kroll en México, Brian Wehis, expresó que “contar con un equipo especializado en ciberseguridad dentro de las compañías, no debe tomarse como un gasto innecesario, por el contrario, es una inversión a largo plazo que ayudará a prevenir, frenar y combatir los ataques cibernéticos, evitando así perdidas millonarias cada año en las empresas”.

No sólo el sector privado debe estar alerta respecto a la seguridad cibernética, también es importante que el gobierno se involucre más para atender este tema prioritario que tranquilizaría a los empresarios mexicanos, y al mismo tiempo beneficiaría a las instituciones gubernamentales en sus diferentes sectores como lo son salud, turismo, economía, y banca, por mencionar algunos, recuperando así la confianza y cooperación entre ambos sectores.

Con el objetivo de ofrecer un mejor panorama de la situación del ciberataque en México, Kroll, ha decidido compartir la siguiente infografía que muestra el comportamiento de esta tendencia mundial, y que en México ha tomado gran relevancia, debido a la insistencia de hackers por realizar ciberataques a las organizaciones bancarias, de telecomunicaciones y manufactura, a través de algún software malicioso, que representa el 25% de los ataques en el país.