RIQUEZA, ¿QUÉ ES NECESARIO SABER PARA ALCANZARLA?
6 de enero del 2012 | por Consumo Inteligente
Alcanzar la riqueza es el deseo de la mayoría de la gente. Además de las actitudes y diferencias de las personas que llegan a dicho fin, hay quienes creen que existe una fórmula mágica para lograr ese sueño. Sin embargo, ¿cuál será esa fórmula mágica? Creo que no existe (¡lo cual es bueno!); daré mi opinión al respecto.
En primer término, el significado de riqueza es, en general, diferente para cada persona. Algunos se consideran ricos por tener voluntad y salud; otros consideran que la riqueza es tener un gran patrimonio y disfrutar con responsabilidad de todo lo alcanzado; otros se consideran ricos porque logran equilibrar trabajo y vida personal.
No hay dudas de que muchos transitan un camino totalmente diferente del que realmente desean, teniendo que convivir con frustraciones y dificultades. Esta realidad se presenta muy a menudo, quizás porque tales personas no saben lo que realmente quieren de la vida: falta de compromiso y disciplina para poner en práctica cambios de gran valor.
En el artículo “Sucesso, riqueza e bem estar: só iniciativa não basta para vencer!”, el autor Conrado Navarro toca un tema muy importante: “Fijar nuevos hábitos y definir prioridades son tareas que presentan desafíos individuales diferentes. En otras palabras, lo que es fácil para uno puede no serlo para otro”.
Otro artículo del sitio Dinheirama define 5 etapas importantes en la construcción de una sólida planificación para transitar el camino hacia la riqueza. Por ejemplo:
1. Etapa de convencimiento personal. Convencerse a sí mismo de que es posible y preciso cambiar la vida financiera para mejor es uno de los grandes problemas de los que hoy no vislumbran cualquier posibilidad de acumular riqueza. La forma en la que muchas personas piensan del dinero es una de las principales causas de fracaso de la administración financiera personal.
2. Etapa del conocimiento financiero. Luego de reconocer la importancia de la capacitación financiera, se ve la necesidad de conocer algunos conceptos financieros básicos para la construcción de la riqueza. Por ejemplo, comprender la diferencia entre el estado de cuentas y el flujo de caja es clave – tales conceptos contienen en sí mismo la esencia del éxito financiero.
3. Etapa de definición de objetivos. Será muy difícil que hoy una persona deje de consumir si no encuentra la inspiración necesaria en el acto de ahorrar. Uso la palabra inspiración porque los objetivos nos hacen tener una actitud más racional, en la medida que mis acciones de restricción están hoy amparadas en conquistas mayores en el futuro.
4. Etapa de cambio de hábitos. Eso significa poder vivir dentro de sus posibilidades financieras (nivel de vida), eliminando gastos superfluos y el pago de intereses de los préstamos y créditos, además de incorporar una visión proactiva en relación con las oportunidades que ofrece el mercado. La palabra clave es: disciplina.
5. Etapa de las inversiones. El saldo de dinero que proviene de sus ingresos debe ser invertido en activos que incrementen su patrimonio. Eso puede hacerse invirtiendo en un negocio propio, en el mercado inmobiliario o en productos financieros, como fondos de inversión, títulos del gobierno, acciones en empresas, etc.
La conclusión a la que llego es bien clara: más difícil que alcanzar la riqueza y el éxito financiero es encontrar el significado individual del concepto de riqueza. A fin de cuentas, lo que hace la diferencia es la felicidad – y eso no tiene precio.
Hasta la próxima.