LOS BENEFICIOS DEL EJERCICIO

15 de septiembre del 2011 | por Martha Olavarrieta

∙ El ejercicio aeróbico crea niveles de colesterol saludables.
∙ La cantidad de ejercicio es más importante que la intensidad.

Estudios recientes demuestran que la incidencia y prevalencia de la obesidad ha incrementado de manera progresiva en los últimos seis decenios en México, esto se debe en parte al aumento de la vida sedentaria entre la población. El sedentarismo se ha extendido más entre la población infantil, por la resistencia a practicar alguna actividad física y la creciente preferencia por pasar varias horas al día viendo televisión y en los video juegos.

Debido a la importancia de fomentar una cultura de actividad física entre la población, el Instituto Carlos Slim de la Salud promueve en su portal www.clikisalud.info, apartado “Buenos hábitos” información y herramientas necesarias para llevar una vida más saludable a través de la práctica de algún ejercicio, pues se ha demostrado que esto ayuda a prevenir enfermedades, además de que las personas físicamente activas viven más y con mejor calidad de vida.

La actividad física tiene múltiples beneficios para el cuerpo, como combatir el cansancio, el aburrimiento y el estrés. Cuando la actividad física se realiza de manera regular, mejora la condición física general, mejora la postura, el equilibrio y el control del peso, refuerza los músculos y los huesos. También reduce la depresión y la ansiedad, mejora el carácter, incluso reduce el síndrome premenstrual, pues ayuda a reducir la inflamación abdominal y disminuye la retención de líquidos.

Una vida más activa tiene numerosas ventajas, entre las que destacan la disminución del riesgo de padecer ciertas enfermedades y molestias, y la posibilidad de mejorar la salud mental. El ejercicio fortalece la capacidad de realizar las tareas diarias a lo largo de la vida y puede ayudar a obtener mayor autonomía en la tercera edad.

Además, se ha demostrado que las personas que se ejercitan con regularidad aumentan la grasa buena, denominada HDL y pueden disminuir los niveles de colesterol. Al realizar ejercicio aeróbico, la principal fuente de energía en los primeros minutos es la glucosa y, al continuar con la actividad, se comienza a perder grasa y conforme se prolongue la actividad, mayor cantidad de grasa se quemará.

Para mantener el ejercicio durante más tiempo se debe realizar de manera moderada para no agotarse demasiado y abandonarlo. La cantidad de ejercicio es más importante y genera mayores beneficios que la intensidad. Si se realiza una actividad física moderada diariamente, se obtienen importantes beneficios.

El ejercicio es bueno para la mayoría de las personas, se recomienda que forme parte de la vida como algo natural, espontáneo y placentero. Pueden incluirse dos tipos de actividades, las de la vida cotidiana y el ejercicio programado.

Las actividades de la vida cotidiana ayudan en gran medida a las personas que jamás han realizado ejercicio o llevan años sin hacerlo, y consisten en hacer un mayor esfuerzo en nuestro actuar diario; por ejemplo, utilizar la escalera en lugar del ascensor, usar menos el auto, levantarse para cambiarle al televisor, sacar a pasear a la mascota, etc. Es importante señalar que la caminata es la actividad más completa y al mismo tiempo la más simple.

Por su parte, el ejercicio programado es el desarrollo de rutinas como correr, nadar, andar en bici y jugar algún deporte. Estas actividades se deben realizar de acuerdo a las posibilidades de cada persona, es más benéfico si se le dedica tiempo todos los días, por lo menos media hora.

Se recomienda practicar ejercicio de manera segura, por eso es importante valorar el estado de salud antes de iniciar con una actividad física, se debe iniciar de manera progresiva y no hacerlo en exceso, en caso de existir molestia, suspender el ejercicio.